"La aparición del Minotauro se transformó en el momento más placentero de esta obra; Walter Cammertoni eligió una composición delicada del monstruo repulsivo, emblema del ostracismo al que todos estamos más o menos sentenciados." La Voz del Interior, 03/11/1993
Diario La Voz del Interior 03/11/1993 (ver nota)